La fotografía ha estado presente en mi vida desde la infancia. Mi primer acercamiento fue gracias a las cámaras desechables que me regalaba mi padre y con las que me impulsaba a explorar. Crecí en un entorno rodeado de libros, música, arte y revistas de National Geographic, donde las imágenes despertaron en mí una profunda curiosidad por el mundo.
Con el tiempo, la cámara dejó de ser un pasatiempo para convertirse en una herramienta esencial de expresión y comprensión. A través de ella, encuentro la manera de conectar con lo desconocido, observar y salir de mi zona de confort. La fotografía me ha permitido alimentar mi curiosidad, formular preguntas, acompañar procesos y aprender de cada experiencia.
Soy egresada de la Escuela Activa de Fotografía.
Mi trabajo se ha desarrollado en torno a la naturaleza, la conservación, el territorio, la vida cotidiana, la música en vivo y la fotografía abstracta. Mi aproximación oscila entre lo documental, lo visual, lo emocional y lo estético, con un interés constante en la narración y en la experimentación técnica.
Concibo la fotografía como un medio para explorar, investigar, narrar y conectar, tanto con el entorno como con quienes lo habitan.